El Centro de Formación Sacerdotal ha organizado una Semana de Estudios entre el 1 y el 5 de febrero, dedicada a la formación espiritual de los candidatos al sacerdocio.

Con esta iniciativa, el CFS ha querido contribuir a la formación continuada de los sacerdotes que, a su vez, tienen el encargo de formar a los candidatos al sacerdocio. La Semana de Estudio ofrece un ambiente ideal para compartir experiencias y reflexionar sobre las propuestas de unos ponentes especialmente cualificados en ese área.

Cerca de ochenta participantes -rectores, directores espirituales y formadores- procedentes de diócesis de varios continentes, se reunieron en el Aula Álvaro del Portillo de la Universidad para intercambiar y discutir experiencias sobre su trabajo en seminarios de todo el mundo.

La Semana fue inaugurada por S.E.R. Mons. Jorge Carlos Patrón Wong, Secretario de la Congregación para el Clero. Tomando pie de las palabras del Papa Francisco, Mons. Patrón dijo que «hay una necesidad de sacerdotes que tengan el corazón compasivo del Buen Pastor, y se conviertan así en canales de la gracia y misericordia del Padre». Para este servicio al pueblo cristiano, los seminaristas necesitan «una personalidad madura, un espiritualidad profunda, una preparación académica y cultural fuerte, una sensibilidad pastoral y misionera animada por la caridad». De aquí la importancia de la formación espiritual, que, en síntesis, «busca suscitar en los candidatos al sacerdocio el deseo de la santidad». La tarea de los que desarrollan un encargo en el seminario es por tanto «formar al hombre, al discípulo, al presbítero, en una armonía lo más integrada posible entre oración, cultura y pastoral».

Ha sido especialmente sugestiva la participación de diversos Obispos que han partido de su propia experiencia como rectores o formadores de seminario, o bien de la atención que prestan en la actualidad a sus candidatos. Así, S.E.R. Mons. Arturo Aiello, Obispo de Teano-Calvi, habló sobre la educación a la comunión; S.E.R. Mons. Stefano Manetti, Obispo de Montepulciano-Chiusi-Pienza, centró su comunicación en la educación a la paternidad espiritual; S.E.R. Mons. Francesco Marino, Obispo de Avellino, disertó sobre el papel del formador; y S.E.R. Mons José María Yanguas, Obispo de Cuenca (España), habló sobre la espiritualidad sacerdotal.

Las otras intervenciones corrieron a cargo de profesores de Universidades Pontificias o sacerdotes que desarrollan un papel en la formación de sacerdotes y seminaristas. Mons. Luis Romera, rector de la Universidad Pontificia de la Santa Cruz, habló sobre las bases antropológicas de la formación espiritual; Mons. Guillaume Derville centró su exposición en la educación a la castidad; y el Prof. Paul O’Callaghan profundizó en el papel de director espiritual del seminario.

Se habló también de las diversas dimensiones de la piedad de los seminaristas: vida eucarística (Mons. Rosario La Delfa), de oración (Prof. Javier López) y de penitencia (Rev. Alfredo Ruiz de Gámiz).

Las sesiones de tarde tuvieron una orientación más práctica e interactiva, con formato seminario, dedicados a los libros para la formación espiritual (moderado por el Prof. Laurent Touze), los retiros y ejercicios espirituales (Prof. Javier Canosa) e y las relaciones entre psicología y dirección espiritual (Prof. Wenceslao Vial).