El Card. Angelo Bagnasco:"Ningún creyente puede comprometer o reducir la salvaguardia de las exigencias éticas fundamentales."

Presentado el nuevo bienal de especialización y máster de "Religión & Sociedad"

ROMA, 14 de noviembre de 2011 - Cada cristiano tiene el deber de participar activamente en la vida pública, de acuerdo con "las formas posibles y convenientes para cada uno". La razón radica en el hecho de que la fe es "integral", "es decir, salva al hombre en su totalidad, en todas sus áreas, inspirando cada ámbito y acción, sea privada o pública." Así lo afirmó el Cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, en el acto de apertura del 25º aniversario del Instituto Superior de Ciencias Religiosas del Apolinar (ISSRA), celebrado el sábado 12 de noviembre.

"Hoy necesitamos reconocer que una cultura radical, inspirada por la difusión de un nihilismo cultural, insiste en la absoluta autonomía de la política, de los valores éticos objetivos y por lo tanto universales, y sostiene una autonomía personal sin límites, excepto aquello que pueda molestar a los demás", argumentó Bagnasco.
Frente a esta interpretación de la política, se debe promover un sentido de responsabilidad y de empeño hacia el bien común de parte de los cristianos. El creyente, "no puede colocar su fe entre paréntesis, ya que sería colocarse entre paréntesis a sí mismo, viviendo separado de su propio ser”; en síntesis:"Ningún creyente puede comprometer o reducir la salvaguardia de las exigencias éticas fundamentales."

En la compleja sociedad de hoy -ha explicado el Cardenal - la Iglesia "no tiene que ver sólo con la caridad, no es una agencia de pronta y extensa intervención social”, como les agradaría a muchos. En cambio, "es necesario afirmar que su quehacer radica en el  anuncio evangélico", de modo que "la sociedad no se transforme en deshumana y la política en un poder por el poder”.

La segunda intervención del día estuvo a cargo del Prof. Sergio Belardinelli, de la Universidad de Bolonia, quien abordo el tema “¿Eclipse o regreso de Dios? Los espacios de la religión en la sociedad postmoderna ".

De acuerdo con el investigador, "en un mundo donde no parece haber ninguna diferencia entre la verdad y el error, o peor aún, entre la verdad y la mentira, la tarea que tenemos es la de mantener viva la idea de la verdad, a pesar de las dificultades. La verdad representa el primer valor no  negociable, la primera forma de indisponibilidad con la que nos enfrentamos todos los días."

Esto se demuestra por el hecho de que "una sociedad que expulsa  la idea de verdad de su discurso público hace más difícil la convivencia."

Hoy en día, añadió el docente, "hemos perdido el sentido de la realidad. Nos contentamos con ficciones, tendemos a asumir estilos de pensamiento que hacen creer que un discurso vale lo mismo que el otro. Esto debilita la realidad". De ahí la tarea urgente "de ser testimonio en este mundo, con la firme convicción de que no estamos solos, de que Dios existe, y que este es el verdadero fundamento de su ser ineludible".

Durante el acto académico se presentó el nuevo Máster de dos años "Religión & Sociedad", que comenzará a partir del próximo 2 de enero 2012. Como lo explica en entrevista el Rev. Prof. Marco Porta, Director del ISSRA, el curso tiene como objetivo responder "a la crisis actual de la antropología y la ética de la política y la economía", sin dejar de lado "la mayoría de los temas cruciales en el centro del debate científico y los problemas que plantea el multiculturalismo, el pluralismo religioso y la relación entre Magisterio de la Iglesia, así como el papel de los laicos en la vida pública. "

De hecho, "hoy no se puede hacer política sin tener un conocimiento profundo de la religión", y esto ayuda a eliminar "los estereotipos que ven en la religión un obstáculo para el progreso de la ciencia, una especie de compensación psicológica o un refugio en la irracionalidad de los sentimientos".
El día continuó con la proyección de una exposición fotográfica sobre la historia de 25 años del Instituto y los testimonios de algunos estudiantes que se formaron en sus aulas.

Significativos son también las diversas cartas y mensajes recibidos por la secretaria del ISSRA, como la de Agata a quien en  los años romanos le ofrecieron "una nueva y definitiva visión de la vida", que ahora ofrece a sus estudiantes; o el de Mario que siente la nostalgia "por el estudio de las materias que le daban alas a su pensamiento" y que le hicieron recorrer “nuevos pasos hacia la renovación de su fe”. Por su parte, Franca, afirma que, gracias a los estudios realizados en el ISSRA, ahora se siente llamada a "trabajar y servir a los demás, especialmente a través de la cultura y la educación".

Para concluir el acto, Mons. Angelo Vincenzo Zani, subsecretario de la Congregación para la Educación Católica, celebró en la Basílica de San Apolinar una Misa solemne para los participantes del evento.

Ufficio Comunicazione